Qué ver en Ámsterdam en 3 días, descubriendo la Venecia del norte

Arte y transgresión. Cultura y movida. Parejas de palabras que en cualquier lugar parecen ser opuestas, pero en la capital neerlandesa van de la mano, creando una mezcla única.

¿Cuántos días se necesitan para visitar Ámsterdam? Os lo decimos nosotros: 72 horas. ¿No nos creéis? Mirad el itinerario que hemos preparado: ¡qué ver en Ámsterdam en 3 días!

3 días en Ámsterdam: itinerario día 1

El recorrido por el centro de Ámsterdam comienza en Dam, su plaza más famosa, accesible desde Nieuwendijk o Damrak. Ha sido testigo de su evolución desde sus humildes comienzos en el siglo XIII. Fue originalmente un dique construido para contener el río Amstel y se ha transformado en un vibrante punto de encuentro para locales y turistas. Aquí encontraréis el Monumento Nacional, un obelisco erigido en honor a las víctimas de la Segunda Guerra Mundial.

Desde allí podréis visitar el Palacio Koninklijk, antiguo ayuntamiento y residencia real (en algunos períodos del año). Es una joya arquitectónica del siglo XVII. Fue pensado como ayuntamiento, pero se transformó en residencia real gracias al rey Luis Bonaparte, hermano de Napoleón. Este majestuoso edificio es un ejemplo perfecto del estilo barroco holandés y aún hoy se utiliza para eventos oficiales y recepciones reales. Los interiores lujosos y las impresionantes obras de arte os transportarán a una época de esplendor y grandeza.

Seguid hacia Kalverstraat y llegaréis a la Torre de la Casa de la Moneda, o Munttoren, un histórico torreón que forma parte de las antiguas murallas de la ciudad. Erigida en el siglo XV, la torre debe su nombre al periodo en que Ámsterdam acuñaba su propia moneda durante la guerra de los Ochenta Años. A lo largo de los siglos, Munttoren ha resistido incendios y renovaciones, y hoy se levanta como un recordatorio de su pasado defensivo, con su icónico carillón que sigue sonando cada cuarto de hora.

Seguid hasta el Bloemenmarkt, el célebre mercado de flores, colorido paraíso flotante situado a lo largo del canal Singel. Fundado en 1862, este mercado es único en su tipo, con barcazas llenas de vibrantes flores y plantas, incluidos los populares tulipanes holandeses. Aquí podréis comprar bulbos para llevar a casa o simplemente disfrutar de la belleza y fragancia de las flores mientras paseáis.

A pocos pasos, veréis la Plaza Rembrandt, nombrada en honor al célebre pintor Rembrandt van Rijn, con su estatua al centro. Esta plaza es un crisol de cultura y entretenimiento: en sus alrededores encontraréis bares, cafés y restaurantes, así como el Teatro Tuschinski, uno de los cines más bonitos de la ciudad. Durante el día, es un lugar ideal para relajarse y disfrutar del ambiente cosmopolita, mientras que por la noche se convierte en un vibrante escenario de diversión y encuentros.

Finalmente, relajaos con un hermoso tour de los canales de Ámsterdam en barco, que os permitirá admirar la capital desde el agua.

3 días en Ámsterdam: itinerario día 2

El segundo día está dedicado a los museos. Llegad a Museumplein (donde, por desgracia, el famoso letrero «I Love Amsterdam» ya no está) y tendréis muchas opciones. Conocida también como Plaza de los Museos, es el epicentro cultural de Ámsterdam. Este amplio espacio verde está rodeado por algunos de los museos más importantes del mundo. Antiguamente una zona pantanosa, fue transformada a finales del siglo XIX en una elegante plaza que alberga eventos, mercados y conciertos al aire libre.

Entre los museos imperdibles de la zona destacamos:

• Rijksmuseum: joya de la corona de los museos de Ámsterdam. Inaugurado en 1885, este imponente edificio neogótico alberga una vasta colección de arte y objetos históricos que abarcan más de 800 años de historia neerlandesa. Entre sus tesoros destacan las obras de Rembrandt, Vermeer y otros grandes maestros del Siglo de Oro neerlandés. El museo impresiona también por su arquitectura y jardines, que son una obra de arte en sí mismos.
• Museo de Van Gogh: un tributo al pintor más famoso de los Países Bajos. Inaugurado en 1973, el museo posee la colección más grande del mundo de obras de Vincent van Gogh, incluyendo sus icónicas «Girasoles» y «La casa amarilla». Además de las pinturas, regala una visión profunda de la vida y la mente del artista a través de sus cartas y otros documentos personales. Es un lugar fascinante para conocer de cerca el legado de este artista revolucionario.

• MOCO Museum: dedicado al arte moderno y contemporáneo. Abierto en 2016, el museo se ha convertido rápidamente en un punto de referencia para los amantes del arte innovador. Sus exposiciones incluyen obras de artistas renombrados como Banksy, Andy Warhol y Yayoi Kusama, ofreciendo una experiencia vibrante y provocativa que desafía las convenciones del arte tradicional.
• Museo de los Diamantes: un homenaje a la relación histórica de Ámsterdam con estas gemas preciosas. Desde el siglo XVI, la ciudad ha sido un importante centro de comercio y talla de diamantes. En este museo podréis aprender sobre el fascinante proceso de formación, corte y comercio de los diamantes, además de admirar una impresionante colección de joyas y piedras preciosas. Es un lugar perfecto para deslumbrarse con la artesanía y el lujo.

Dedicad unas horas a la Heineken Experience, una inmersión en el mundo de una de las cervezas más famosas del planeta. Situada en la antigua fábrica de Heineken, que data de 1867, esta atracción es una mezcla de historia, tecnología y degustación. A través de exhibiciones interactivas, podréis conocer el proceso de elaboración de la cerveza, la historia de la marca y disfrutar de una degustación al final del recorrido. Es una experiencia divertida y educativa para todos los amantes de la cerveza.

Absolutamente recomendable un poco de relax en Vondelpark, el pulmón de Ámsterdam y su parque más grande. Inaugurado en 1865, este oasis urbano ofrece un escape perfecto del bullicio citadino con sus amplios senderos, estanques y áreas verdes. Es un lugar ideal para hacer picnic, practicar deportes, disfrutar de eventos culturales o simplemente relajarse. También encontraréis el teatro al aire libre y varios cafés encantadores, lo que lo convierte en un destino favorito para locales y turistas por igual.

Después de tanta arte y naturaleza, por la noche no puede faltar una visita a uno de los lugares más icónicos de Ámsterdam, el Barrio Rojo. Conocido localmente como De Wallen, es famoso por sus escaparates iluminados y su vida nocturna vibrante. Sin embargo, este barrio tiene mucho más que ofrecer que su fama internacional. Con una historia que se remonta a la Edad Media, el Barrio Rojo cuenta con algunos de los edificios más antiguos, incluyendo la Oude Kerk (Iglesia Vieja). Además, encontraréis una mezcla ecléctica de tiendas, museos, bares y restaurantes.

3 días en Ámsterdam: itinerario día 3

El último día nos dedicamos a las áreas este y oeste de la ciudad. Empezamos en los límites del barrio Jordaan con una visita a la Casa de Ana Frank (cuidado porque es necesario reservar con mucha antelación). Es un poderoso símbolo de la resistencia y la humanidad en tiempos de guerra. Situada en el Prinsengracht, esta casa es donde Ana y su familia se escondieron de la persecución nazi durante la Segunda Guerra Mundial. Transformada en museo en 1960, la casa preserva el escondite secreto y expone el famoso diario de Ana, junto con otros elementos que narran la vida de los Frank y la tragedia del Holocausto. Es un lugar conmovedor que invita a la reflexión y a la memoria.

A pocos minutos encontraréis el Museo de los Tulipanes. Pequeño pero fascinante, explora la historia y el impacto cultural del tulipán, desde su introducción en Europa en el siglo XVI hasta la famosa Tulipomanía del siglo XVII. Aquí podréis aprender sobre su cultivo, admirar variedades exóticas y entender cómo esta flor se convirtió en un símbolo nacional. Atención: aquí los precios son más altos que en el mercado de flores.

Si tenéis buenas piernas, en menos de media hora podréis llegar a la zona noroeste y visitar el NEMO Science Museum. Diseñado por el renombrado arquitecto Renzo Piano, es una maravilla arquitectónica y educativa. Abierto en 1997, este museo interactivo de ciencia está ubicado en un edificio que se asemeja a un enorme barco verde. En su interior hay exhibiciones que hacen que la ciencia sea accesible y divertida para todos. Desde experimentos prácticos hasta exhibiciones sobre el cuerpo humano y el universo, NEMO es un lugar donde la curiosidad se encuentra con el aprendizaje.

No os perdáis el Museo Marítimo Nacional, o Het Scheepvaartmuseum, tributo a la rica historia naval de los Países Bajos. Ubicado en un antiguo almacén de la marina del siglo XVII, cuenta con una impresionante colección de mapas, globos, pinturas y modelos de barcos que ilustran el papel crucial neerlandés en la navegación mundial. Una de las atracciones principales es la réplica del Ámsterdam, un barco de la Compañía Neerlandesa de las Indias Orientales, atracado junto al museo.

Finalmente, bajando hacia el centro de Ámsterdam, podéis dar un paseo por el Jardín Botánico o Hortus Botanicus. Fundado en 1638, es uno de los jardines botánicos más antiguos del mundo, y tiene una vasta colección de plantas raras y exóticas. Entre sus tesoros se encuentra una casa de palma histórica y un invernadero tropical. El jardín es un refugio tranquilo donde podéis pasear entre la naturaleza, aprender sobre botánica y disfrutar de la belleza de sus vegetación.

En resumen, hay un montón de cosas que ver en Ámsterdam en 3 días. ¡Ahora solo os queda ir y descubrirlas en persona! Y si no queréis ir solos, podéis uniros a uno de nuestros viajes en grupo.

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