La Ciudad eterna tiene una historia de tantos siglos atrás que cuesta hacerse una idea de todas las civilizaciones que han pasado por aquí. Hoy, lo antiguo y lo moderno se mezclan de formas que desafían la lógica, tal y como lo hace una Vespa para esquivar el característico tráfico romano. Además de ser un museo al aire libre, Roma es una experiencia sensorial: aroma a pizza recién horneada, risas en las plazas y el eco de los emperadores que siguen haciéndose notar en las ruinas. Si te vas de vacaciones, descubre cuáles son los 15 lugares más importantes que ver en Roma.
Sitios, curiosidades y lugares imprescindibles que visitar en Roma
Roma, estratégicamente situada en el corazón de Italia, es el lugar donde la historia antigua y la vida moderna chocan con un estilo que solo los romanos pueden lograr. Fundada por Rómulo y Remo, en la actualidad disfruta de su estatus como centro del cristianismo. Con una narrativa que deja sin palabras, sus tesoros arquitectónicos son mucho más que reliquias; son testigos vivos de varios siglos de grandeza. Si estás planeando tu próximo viaje, aquí te contamos todo lo que ver en Roma para disfrutar de su historia y encanto único.
Con estos 15 lugares que ver en Roma, te harás una idea de todos los acontecimientos que se produjeron a lo largo de los siglos. Pero también comprobarás las maravillas de las que el ingenio humano es capaz.
El Coliseo Romano: el símbolo de la antigua Roma
Si te preguntas qué ver en Roma en una sola tarde si es todo el tiempo del que dispones y no tienes demasiada energía, el Coliseo Romano es la respuesta. Este anfiteatro es una de las maravillas del mundo antiguo, ya que el Coliseo Romano antes fue el escenario de espectáculos de gladiadores y combates con animales salvajes. Aunque espectacular es precisamente la palabra que usaríamos para definirlo, en su momento el olor debía ser bastante intenso. Además, podía albergar hasta 65 mil espectadores sedientos de sangre y drama.
En la actualidad, podrás visitar la zona de las gradas, la arena y las partes subterráneas, que te transmitirán la historia del Coliseo Romano. Pero quizás para tu reportaje de fotos lo que más te interesará es un selfie desde el exterior con su fachada.
El Foro Romano: un paseo por la historia
Una de las cosas que visitar en Roma y que puedes combinar con la anterior es esta. Seguro que has oído hablar de él, pero si no sabes qué es el Foro Romano, te podemos decir que es el sitio donde los antiguos romanos discutían sobre política, compraban frutas y se relacionaban allá por el siglo I.
Como ha pasado tanto tiempo, son ruinas de templos, arcos y columnas que fueron parte del Imperio Romano y entre las que podrás caminar. Es un museo al aire libre, y los sitios más importantes para visitar en la Vía Sacra son el Arco de Tito y el de Severo Séptimo; los Templos de Vesta, Antonio y Faustino, Cástor y Pólux, Saturno y Julio César; la Columna de Foca y la Basílica de Majencio y Constantino. Y por supuesto, sube a la Plaza del Campidoglio, con una vista única de todo el Foro.
La Fontana di Trevi: un lugar mágico para lanzar una moneda
La Fontana di Trevi es uno de los sitios imprescindibles, ya que tiene más historia que las cuentas de Instagram. Cuenta la leyenda que si lanzas una moneda con la mano derecha y sobre el hombro izquierdo, si no, no funciona, te estarás asegurando tu regreso a Roma. Si son dos, te surgirá una historia de amor, y con tres, habrá matrimonio.
Una de las curiosidades de la Fontana di Trevi es que los cientos de euros que se recaudan a diario van a parar a obras benéficas. En cuanto a la historia de la Fontana de Trevi, está en el lateral de una plaza y terminó de construirse en 1762. La escultura de Neptuno con su carro de caballos marinos y tritones es la gran protagonista, y la que la ha convertido en la fuente más bonita del mundo.
El Panteón: un templo impresionante de la antigüedad
¿Sabías que el Panteón es el edificio mejor conservado de la antigua Roma? Es un templo dedicado a todos los dioses, pero se convirtió en un hito arquitectónico que haría llorar a cualquier ingeniero moderno. Su cúpula, con un óculo en el centro, es una obra maestra que juega con la luz de una forma casi mágica.
Antes de entrar, detente para contemplar su monumental fachada y trata de imaginar cómo debía ser caminar por aquí hace 2 mil años. En el interior, te sentirás diminuto, pero valorarás la tranquilidad que se respira por el silencio. Las multitudes te acompañarán siempre en esta ciudad. Aquí hay también varias lápidas, y si te preguntas quién está enterrado en el Panteón de Roma, son el pintor Rafael y algunos reyes italianos. Toma nota, porque es otro de los lugares que visitar en Roma sí o sí.
La Plaza Navona: arte y arquitectura en el corazón de Roma
Pasear por esta plaza es una de las cosas que hacer en tu visita. Aquí se fusionan el arte y la arquitectura con las cafeterías caras, pero que son tan adorables, que te apetecerá pasar para tomar algo. Está construida sobre el antiguo estadio de Domiciano y tiene una forma alargada. Y es que una de las curiosidades de la Plaza Navona es que estaba dedicada al atletismo en la época romana. Tiene tres fuentes barrocas que adornan el espacio. Entre ellas, la fuente de la Plaza Navona más importante es la de los Cuatro Ríos.
La ciudad eterna tiene algo para todos: aquí encontrarás los mejores lugares que ver en Roma para enamorarte de cada rincón.
La Ciudad del Vaticano: el epicentro del cristianismo
La Ciudad del Vaticano tiene una extensión de 0,44 km² y tiene una población que no supera los 800 habitantes. Es una ciudad estado en el interior de Roma y es el lugar donde reside el Papa. Aquí hay concentrados varios siglos de historia, arte y política.
Como veremos, hay paradas importantes como la Basílica de San Pedro, con su preciosa cúpula diseñada por Miguel Ángel, o los Museos Vaticanos. En ellos está la archiconocida bóveda de la Capilla Sixtina y su legendario techo. Pero si quieres evitar grandes colas y asegurar la visita, reserva tus entradas con antelación.
Desde el Coliseo hasta el Vaticano, descubre los imprescindibles que ver en Roma y organiza tu itinerario perfecto.
La Basílica de San Pedro: la joya del Vaticano
Situada en la Ciudad del Vaticano, la historia de la Basílica de San Pedro es tan increíble como el lugar. Cuenta la tradición que el apóstol Pedro fue crucificado y enterrado aquí. En el siglo IV, el emperador Constantino ordenó construir una iglesia sobre su tumba, y fue ahí cuando empezó su importancia religiosa.
No obstante, lo que verás hoy de esta construcción es un proyecto más nuevo del Renacimiento. Sus arquitectos fueron Bramante, Rafael y Miguel Ángel. Este último es quien diseñó la cúpula. Las vistas desde esta no se pueden describir, y para que te hagas una idea de si valen o no la pena, se te olvidará hasta el precio que debes pagar por subir.
La Capilla Sixtina: la obra maestra de Miguel Ángel
Otro de los sitios que visitar en Roma en 3 días o los que dure tu viaje es esta capilla. Está también en la Ciudad del Vaticano, pero lo que realmente importa son los frescos de La Creación de Adán y el Juicio Final de la Capilla Sixtina. Están en el techo, pero no subestimes las paredes. Miguel Ángel dejó aquí su alma, y probablemente su paciencia, para crear una de las obras más icónicas del Renacimiento.
Si te gustan los detalles, lleva binoculares. Pero como la esencia de esta ciudad son las multitudes, es mejor ir temprano. Y como dato de interés, parece ser que Miguel Ángel no quería pintar este techo. Quizás eso explica las emociones fuertes y el toque de rebeldía del fresco. La pintura, queremos decir.
El Castillo de Sant’Angelo: una fortaleza con vistas al Tíber
Este castillo es como el primo multifacético de Roma: ha sido mausoleo, prisión, fortaleza y ahora museo. Está situado en la orilla derecha del río Tíber, y es conocido por sus vistas espectaculares y por ser una mirada al pasado menos glamuroso de la ciudad.
En el Castillo de Sant’Angelo podrás pasear por sus túneles y terrazas mientras te imaginas cómo sería estar atrapado aquí en la Edad Media. Si vienes a la hora del atardecer, tendrás una vista dorada del río y del Vaticano. Y por si no lo sabías, ambos están conectados por un corredor fortificado, llamado el Passetto. Es la vía de escape del Papa si algo pasara.
La Plaza de España: escaleras icónicas y encanto romano
¿Quieres sentirte en una película? Esta plaza es el escenario perfecto. La escalinata de la Plaza de España de Roma es todo un icono, y conecta con la iglesia de la Trinità dei Monti. Si te agota subirlas, siéntate al final y disfruta del ajetreo romano. Pero ojo, nada de ponerse a comer aquí porque lo mismo te llevas junto a tus souvenirs una multa de recuerdo. Y en la base, tienes la fuente de la Barcaccia, donde vale la pena hacerse una foto. Como en todas las cosas que ver en Roma, mejor ir temprano.
El Trastevere: el barrio más pintoresco de Roma
Uno de los sitios que ver en Roma es este barrio. Es el más popular de la ciudad y también el más querido, porque está lleno de encanto de día y de noche. Con callejuelas estrechas, debe su nombre al tras-Tevere, que significa “al otro lado del Tevere”, un río. Aquí se hospedó durante siglos la clase obrera que trabajaba en el puerto o en las fábricas.
Además de pasear por sus calles y tomar algo en sus restaurantes y cafeterías, hay algo más que hacer en Roma en este barrio. Es el triángulo que tiene como vértice a la iglesia de San Francesco a Ripa y en la base a las basílicas de Santa Cecilia y Santa María.
El tramo a la basílica de Santa Cecilia en Trastevere te llevará por el vicolo dell’Atleta, donde hay ruinas de las antiguas sinagogas. También hay termas romanas y restos de la época medieval, como frescos y mosaicos. La siguiente parada es la Basílica de Santa María en Trastevere.
La Villa Borghese: un pulmón verde en la ciudad eterna
La Villa Borghese es el escape perfecto del caos urbano. Este enorme parque es ideal para hacer picnics, pasear en bicicleta o simplemente disfrutar de un paseo mientras contemplas la belleza de los alrededores. Te lo recomendamos como una de las cosas que hacer en Roma porque aquí se encuentra también la Galería o Museo Villa Borghese, que alberga obras de Caravaggio y Bernini. Si el arte no es tu pasión, no te preocupes, el entorno por sí solo merece la visita. Alquila una bicicleta para recorrer el parque en menos tiempo y, si buscas un toque de relax, este es tu lugar.
El Mercado de Campo de’ Fiori: tradición y sabor local
Si eres amante de los mercados y dispones de tiempo suficiente, el Campo de’ Fiori te fascinará. Es una excelente opción para descubrir los ingredientes más auténticos de la cocina romana, como el aceite de oliva. Por la mañana, el mercado cobra vida con su vibrante actividad, mientras que por la noche, se transforma en el lugar perfecto para disfrutar de un aperitivo o una cena al aire libre.
El Arco de Constantino: un monumento a la victoria
El Arco de Constantino es el equivalente romano a un gran cartel que diga: “¡Mira lo increíble que soy!”. Se construyó en el año 315 d.C. para conmemorar la victoria de Constantino en la batalla del Puente Milvio.
Una de las curiosidades del Arco de Constantino es que fue pionero en el upcycling que usamos ahora, porque aquí se reciclaron piezas de monumentos anteriores. En cuanto a las características del Arco de Constantino, solo debes fijarte en los detalles de los relieves. Queda patente el tamaño del ego de estos emperadores.
Las Catacumbas de Roma: un viaje al mundo subterráneo
¿Ya tienes el móvil lleno de selfies a pleno sol? Ahora es el turno de unas imágenes bastante diferentes. Si hay que elegir una de las cosas que hacer en Roma en 4 días más inusuales, sin duda es visitar las Catacumbas. Se trata de un laberinto subterráneo donde los primeros cristianos enterraban a sus muertos y practicaban su fe en secreto.
Estas galerías, que parecen sacadas de una película de Indiana Jones, te darán escalofríos mientras te maravillas con su historia. Pero no esperes encontrar esqueletos a lo Scooby-Doo; lo que queda aquí es más discreto, pero igual de impresionante. Si te preguntas cuáles son las mejores catacumbas de Roma, te recomendamos visitar las de San Calixto o las de San Sebastián. Ambas están cerca de la Appia Antica. Vayas a las que vayas, llévate un suéter.
¡Ya tienes todo lo que puedes ver en Roma! Una Ciudad Eterna que es mucho más que un simple destino de viajes. Historia presente en cada monumento de sus calles, arte desbordado por cada esquina y una vida cotidiana tan caótica como encantadora. Su belleza no entiende de tiempo y hoy ofrece a los viajeros multitud de experiencias adaptadas a todos los gustos. Para que estas no queden en un proyecto frustrado, ¡reserva ya tu sitio en nuestro viaje organizado a Roma!