Grecia es la mezcla perfecta de cultura antigua, islas con casas blancas, impresionantes puestas de sol sobre el mar y buena comida. ¿Qué ver en un viaje a Grecia? ¡Os damos algunos consejos!

Llevamos a Grecia en el corazón: es uno de nuestros destinos favoritos cuando se trata de viajes de verano en los qué disfrutar del mar y la diversión. Nos encanta tanto porque es multifacético: es ideal para todos los perfiles de viajero. Más o menos en todas partes se pueden admirar los restos de la civilización griega, con ruinas antiguas increíblemente bien conservadas, y las tradiciones se viven en las calles y en los mercados.

Grecia continental es ideal para aquellos que buscan un viaje para redescubrir la historia antigua de este país. Las islas, desde las Cícladas hasta las Jónicas, son perlas de rara belleza, donde los ritmos se relajan y las tardes de verano son refrescadas por la brisa que llega del mar. Tampoco faltan los momentos de celebración y diversión: por la noche, en algunas islas, ¡nunca se duerme!

Qué ver en Grecia: ¿qué islas Cícladas visitar?

Santorini

chica con vestido blanco bajando escaleras por las calles de santorini, una de las islas griegas más famosas. Edificios blancos con cúpolas aules. Al fondo el mar y el cielo azules - weroad

Santorini es una de las islas más hermosas de toda Grecia. Probablemente sea por su particular conformación: la mayor parte de la isla da hacia una caldera y la vista desde aquí tiene algo mágico. Las puestas de sol en Santorini se encuentran entre las más bellas y fotografiadas del mundo. Entre los lugares más famosos están: Oia, el más elegido y, por lo tanto, el más concurrido, y el faro de Akrotiri, un sitio más tranquilo. En los acantilados que dominan la caldera también hay muchos hoteles y resorts de lujo, que bastantes viajeros eligen para un viaje romántico o una luna de miel.

Menos costoso es el interior y la zona de la playa, donde también hay más vida nocturna. ¿Qué hacer en Santorini? Visitad Fira, la capital, y Pyrgos, un centro menos solicitado y más auténtico. Si os gusta el senderismo, podéis hacer trekking de Fira a Oia (unos 9 km o 2 horas de caminata) que pasa al lado de la caldera y ofrece unas vistas increíbles. Si os gusta la historia, podéis descubrir más sobre el pasado de Santorini en el sitio arqueológico de Akrotiri. Finalmente, ¡no os olvidéis de hacer una degustación de vino local en una de las muchas bodegas!

Míkonos, una de las más famosas islas griegas

playa de mykonos, al fondo casas que dan al mar y mesas de un restaurante - weroad

De todas las islas de Grecia, Mykonos tiene la reputación de ser la que tiene la vida nocturna más animada, tanto que, a menudo, se le compara con Ibiza. De hecho, se le asemeja mucho: si estáis buscando un viaje dedicado a las noches en la discoteca y los días de siesta en la piscina o en la playa, Mykonos es para vosotros. Entre cócteles, pasead por la calle Matoyianni, la calle comercial que desemboca en la Pequeña Venecia, un barrio donde las casas se construyen sobre el mar y parecen flotar en el agua.

Una característica de Mykonos son los molinos de viento: será imposible no verlos al menos una vez durante la estancia. Si estáis cansados de la vida nocturna y buscáis algo más auténtico, podéis hacer una escapada a Ano Mera, un pequeño pueblo que aún conserva el encanto de pueblo mediterráneo. ¿Queréis hacer la foto perfecta del atardecer? Entonces os recomendamos que vayáis al faro de Armenistis. El faro en sí no representa ninguna atracción (está abandonado), pero desde aquí la vista vale la pena, ¡solo prestad atención al camino de tierra que debéis recorrer para llegar allí!

Milos

una playa de roca lisa con un arco a través del cual se ve el mar en sarakiniko, en una de las islas de grecia, milos - weroad

Milos se convertirá en el nuevo Santorini eventualmente. Así que nuestro consejo es: daros prisa y visitadlo ya, que aún no está asediado por turistas y así podréis disfrutar de su belleza. El mar aquí es de un azul increíble y en Sarakiniko se hace aún más intenso por el color de las rocas, de un blanco puro. Esta playa es la que más aparece en las fotos porque el paisaje parece casi lunar: ¡es una parada que no os podéis perder!

En Milos no puede faltar una excursión en barco para admirar las espectaculares formaciones rocosas (siempre blancas) y también para darse un buen chapuzón en mar abierto. Los centros habitados –como Adamas o Plaka– merecen una visita para sumergirse en la cultura griega, compuesta por casas blancas, tabernas donde comer queso feta al horno y el dulce sonido de la música que resuena en las estrechas calles. Si podéis, añadid a vuestro itinerario los pueblos de pescadores (algunos accesibles solo por mar) de Klima, Madrakia y Firopotamos, típicos y hermosos.

Naxos

arco cuadrado, restos del templo de apolo en naxos, una de las islas de grecia - weroad

De las islas Cícladas, Naxos es la más grande: no faltan cosas para ver y hacer aquí. Y no es casualidad que la mayoría de los viajeros vayan por el mar: las playas entre las qué elegir son casi infinitas. A algunas se puede llegar a pie desde Naxos (la ciudad principal), pero para otras se necesita un coche o una moto. Entre nuestras favoritas están la de Kastraki, que tiene una bonita panorámica de la vecina isla de Paros, y de Pyrgaki, ¡despoblada y con dos tabernas para comer con vistas al mar!

Si os gusta la historia, a Naxos tampoco le faltan puntos de interés. En Chora se puede llegar a la Portara, lo que queda de un templo inacabado dedicado a Apolo. En Apollanas y Flerio se pueden ver los kouroi, enormes estatuas de mármol sin terminar que aún se encuentran en las canteras. El interior también merece la pena: en Halki se puede degustar kitron, un licor local, mientras que en Filoti, después de visitar la ciudad, se puede hacer senderismo. Aquí, de hecho, el camino comienza a subir al Monte Zeus, el más alto de las Cícladas y el lugar de nacimiento del dios Zeus.

Paros

barcos amarrados en el puerto de paros, una de las islas griegas, al fondo casitas blancas con puertas y ventanas azules - weroad
Barcos en el purto de Paros

Cerca de Naxos encontramos Paros, una isla probablemente más tranquila y, por ello, elegida por los que buscan un poco de paz. Id a Naoussa para probar la buena comida griega en algún pequeño restaurante. Naoussa solía ser un antiguo pueblo de pescadores y ahora es la ciudad más de moda de la isla. Para ir a un lugar menos concurrido, acercaros a Lefkes, uno de los pueblos más pintorescos y característicos de toda la isla. Aún más apacible es el pequeño puerto de Piso Livadi, con tabernas familiares mirando al mar.

No hay escasez de playas para elegir en Paros. Al igual que ocurre con el resto de islas, la mejor manera de visitarlas es disponer de vehículo propio, ya sea un coche o, mejor aún para encontrar aparcamiento, una scooter. Si os gusta el senderismo, en el Parque de Paros hay varias opciones de rutas. Y, después de haber caminado, podéis daros un chapuzón en el mar en la playa de Monastiri. Una última excursión que no os podéis perder es la del islote de Antiparos, donde las calas son íntimas y las formaciones rocosas espectaculares.

Islas de Grecia del Dodecaneso, cuáles visitar

Rodas

coordinador weroad de espaldas, con mochila roja, sentado en un murillo en la isla de symi, cerca de rodas, mirando casitas y mar

Rodas es la mayor de las islas del Dodecaneso y en la antigüedad era conocida por el Coloso de Rodas, una de las siete maravillas del mundo antiguo. Desafortunadamente, después de un terremoto que lo destruyó, no queda nada de éste. En Rodas, sin embargo, no faltan cosas para ver y hacer. Empezando por la ciudad medieval de Rodas, que es la ciudad fortificada más grande y mejor conservada de toda Europa. Lindos es el segundo pueblo que os recomendamos visitar, especialmente por su Acrópolis, desde donde podréis apreciar una postal impresionante del Mar Egeo.

Para aquellos que quieren sumergirse en la historia, una visita al sitio de Camiro vale la pena. Si deseáis relajaros en la playa, las opciones son muchas pero, nuevamente, es mejor tener un coche, pues de lo contrario, llegar allí es complicado. Si amáis a los animales, podéis hacer un viaje al Valle de las Mariposas: ¡aquí, entre junio y septiembre, los árboles están literalmente cubiertos de ellas! Para un día de mimos, dirigiros a los manantiales de Kallithea, que se dice que tienen propiedades terapéuticas y curativas. Para un viaje fuera de la ciudad, id a la cercana isla de Simi, caracterizada por casas de colores que contrastan con el azul del mar.

Kos

selfie grupo viajeros weroad en una escalera de la ciudad de kos, de fondo casas blancas y el mar

Kos tiene todo lo que una isla griega debería tener. Estamos muy cerca de las costas turcas –Bodrum está a sólo 4 km– y el aire que se respira es esa interesante mezcla de cultura griega y de Oriente Medio. Kos también se llama la isla de Hipócrates, porque el padre de la medicina nació, vivió y enseñó aquí. En la zona portuaria de la ciudad de Kos se puede ver el famoso plátano de Hipócrates, bajo cuyas ramas se dice que dio sus lecciones.

¿Qué más ver y hacer en Kos? Los pueblos del interior son hermosos e íntimos, inmersos en la paz de las montañas. Entre las playas, nuestra favorita es la de Agios Stefanos, frente a la isla homónima a la que también se puede llegar nadando. Una excursión que os recomendamos hacer es la de la cercana isla de Nisyros, donde es posible caminar en la caldera del volcán Plyvotis.

Karpathos

panorama de un pueblo en la ladera de una montaña en una de las la islas de grecia, karpathos, al fondo mar y montaña - weroad

Salvaje y pacífica, la isla de Karpathos es la más al sur de las del Dodecaneso. Karpathos no se encuentra entre los destinos más demandados por el turismo de masas. Mantiene intacto su espíritu más auténtico y su carácter algo agreste, que se respira, sobre todo, en los pueblos serranos. Entre ellos, os aconsejamos que no os perdáis Aperi, Volada y Othos. No hace falta decir que las playas también merecen la pena. Hay muchos para elegir, algunos más populares y otros decididamente más salvajes.

Qué ver en Grecia: Islas Jónicas

Zante

dos viajeras con mochila weroad de espaldas en un puente de madera suspendido en el agua mirando una roca en la isla cameo, zante

Zakynthos (Zante) y Corfú son dos de los destinos favoritos en los últimos años con lo que respecta a la vida nocturna. Están ubicados en el mar Jónico y se puede llegar a ellos tanto en avión como en ferry. Se dice que en Zakynthos nació Venus. Para visitar la isla, empezad desde la ciudad de Zante y luego continuad descubriendo todas sus hermosas playas.

¿Qué recomendamos ver en Zante? Sin duda, la playa del naufragio, también llamada Playa Navagio. Solo se puede llegar en barco, pero merece la pena: en ella se encuentran los restos de un viejo barco, lo que hace que el paisaje sea muy sugestivo. Y es aún más linda vista desde arriba: a medio camino, entre los pueblos de Volimes y Anafonitria, se puede bajar a un balcón natural que da a la playa. Otro lugar imperdible de Zante son las Cuevas Azules, encantadoras ensenadas excavadas en la roca blanca junto al mar.

¿Os han entrado ganas de visitar Zante? Podéis ir en nuestro viaje de 8 días.

Corfú, una de las islas griegas más divertidas

grupo de viajeros de weroad en el trono kaiser william II en corfú, observatorio desde donde se ve la ciudad

De las islas Jónicas, Corfú es probablemente la más conocida por ser la más fiestera. La vida nocturna es uno de los grandes atractivos de la isla y son muchos los jóvenes que acuden cada verano a las discotecas más famosas. Por supuesto, el mar también es bonito: las playas aquí invitan, especialmente, después de las 6 a.m. Los pueblos son los típicos griegos y, para adentrarse en la historia, podéis visitar el Achilleion, la residencia de verano de Sissi.

En WeRoad hemos organizado un viaje de 8 días a Corfú con visita a otras islas, ¿os apuntáis?

Paxos

barcos de vela en el puerto de paxos, al fondo casitas, montaña y cielo azul - weroad

Paxos es la más pequeña de las islas Jónicas, tiene solo 10 kilómetros de ancho y se cree que fue creada por el mismo Poseidón. El pequeño tamaño la hace perfecta para un viaje “green”: es posible alquilar bicicletas y viajar solo sobre dos ruedas. Hay muchas playas para elegir, así como excursiones de un día a los islotes cercanos. Por ejemplo, puedes llegar a Antipaxos –que tiene 100 habitantes y es muy tranquila–, Panagia y Ai Nikolaus. En estas dos últimas se puede visitar algunas iglesias ortodoxas y antiguos monasterios.

Creta, de las más fascinantes islas de Grecia

barco en agua verde en la playa de balos en creta, una de las islas de grecia. al fondo una montaña y cielo azul - weroad

Creta es la más grande de todas las islas de Grecia y pareciera ser un país. Os sugerimos alquilar un vehículo para transportaros, así tendréis mucha más libertad para viajar por toda la isla. Empezad desde la capital, Heraklion, donde descubriréis la historia de la civilización minoica que dominó la isla. ¿Minos y el Minotauro os suenan de algo? Visitad el palacio de Knossos, el principal sitio arqueológico de la isla.

Playas de Creta, cuáles escoger

Visitad en primer lugar la playa rosa Elafonissi donde, si la suerte os acompaña, podréis ver tortugas marinas. De igual forma, podéis ir a una playa si visitáis Canea, un pequeño pueblo que conserva aún una mezcla perfecta de las dominaciones que tuvo la isla: bizantina, otomana y veneciana. Las excursiones de un día que no se pueden perder son las cercanas islas de Chrissi, un pequeño paraíso con apariencia tropical, y Spinalonga, que fue baluarte de la República de Venecia.

Belén Maviglia
Scritto da Belén Maviglia