Tiziano Terzani escribió: “El tren, con sus comodidades de tiempo y sus incomodidades de espacio, devuelve la curiosidad olvidada por los detalles, afina la atención por lo que tenemos alrededor, por lo que pasa fuera de la ventana. En los aviones pronto se aprende a no mirar, a no escuchar”. ¡Cuánta razón tenía! Porque los viajes en tren son perfectos para recuperar esa perspectiva en la que no solo cuenta el destino, sino también el espacio y el tiempo empleados para alcanzarlo.
Hoy, viajar en tren parece anticuado. Sin embargo, son muchísimos los itinerarios sobre rieles capaces de llenar de belleza el corazón y los ojos. Si, después de leer esto, estáis sintiendo emoción o curiosidad, seguid leyendo porque os explicaremos por qué estos recorridos son perfectos tanto para unas vacaciones largas como para un fin de semana lento. Hay para todos los gustos.
Orient Express
Agatha Christie lo inmortalizó en una de sus novelas más famosas. Y no es casualidad que hoy sea uno de los trenes más célebres del mundo. Su historia se remonta a mucho tiempo atrás: el Orient Express fue inaugurado a finales del siglo XIX para conectar Europa occidental con la oriental. Transportaba pasajeros adinerados desde Francia hasta Rumania (y luego hasta Estambul) para convertirse, muy poco tiempo después, en sinónimo de confort y lujo extremo.
Los años 20 y 30 representaron su período de máximo esplendor, pero el auge de los viajes en avión literalmente marcó su fin: el Orient Express cayó en desgracia y la línea fue suprimida. ¿Por qué hablamos de él entonces? Sencillo: gracias a los esfuerzos de la compañía Belmond Train, este icónico tren ha vuelto a viajar sobre rieles, listo para recibir a todos aquellos que quieran abandonarse a las atmósferas nostálgicas de antaño. De Ámsterdam a Venecia, de París a Praga, de Estambul a París, son muchísimas las rutas del resurgido Venice Simplon Orient Express. El coste no es accesible, pero si tenéis un ahorro y queréis gastarlo en una experiencia especial, el Orient Express está listo para acogeros.
Maharaja Express
Cuando pensamos en viajes en tren en India, seguro os vienen a la mente imágenes no muy alentadoras. Esto es porque nunca habéis oído hablar del Maharaja Express, un verdadero hotel de lujo sobre raíles. Ha ganado el premio “World’s Leading Luxury Train” durante siete años consecutivos y hoy permite viajar por India disfrutando de atmósferas realmente especiales.
De Delhi a Agra, pasando por Mumbai, Jaipur y Varanasi, sin duda es una forma diferente e intensa de descubrir India a través de cuatro diferentes recorridos que, en conjunto, tocan diez ciudades. Los viajes duran una semana y permiten moverse de noche (pernoctando en lujosas suites con baño privado) para descubrir los lugares más icónicos del país durante el día. Obviamente, también en este caso hay que tener una cuenta bancaria robusta, pero soñar es gratis y no le hace daño a nadie.
Bernina Express
Vale, ahora volvamos a la Tierra para hablaros de viajes en tren más accesibles desde el punto de vista económico. Uno de los recorridos sobre rieles más famosos está en Italia y transporta cada año a muchísimos pasajeros a Suiza. Llamado también (muy poéticamente) Trenino Rosso del Bernina (Trenecito rojo de Bernina), es una obra maestra de ingeniería que, con sus vagones rojo fuego, recorre 60 km de gran belleza conectando la italiana Tirano con la suiza Saint Moritz.
Es uno de los trenes panorámicos más bellos del mundo, pero también uno de los ferrocarriles más empinados del planeta. Se eleva 2.253 metros hasta alcanzar Ospizio Bernina, el punto más alto alcanzado por un tren en Europa, para luego descender suavemente hasta los 1.800 metros de St. Moritz.
Inútil decir que el paisaje que se despliega fuera de la ventana es maravilloso, en especial en invierno, cuando la nieve decora las montañas que el tren atraviesa. En cuanto al coste, es muy accesible: para un viaje de ida y vuelta en el día el precio ronda los 60€. En resumen, es una experiencia que hay que hacer en la vida, confiad en nosotros.
Glacier Express
Quedémonos un momento en Saint Moritz para subirnos a otro tren suizo: el Glacier Express. Es el tren expreso más lento del mundo: en unas ocho horas el convoy lleva de St. Moritz a Zermatt atravesando 91 túneles y 291 puentes.
Si sufrís de vértigo, armaros de valor, porque cuenta con ventanas panorámicas de altura completa. Con vértigo o no, tendréis una vista privilegiada sobre la belleza de los Alpes y sus valles remotos, increíbles paredes rocosas y pintorescos pueblos. Podréis presenciar todo esto incluso con una comida de seis platos regada con champán a bordo del tren. ¡Qué lujo! Y por un precio que va de 30€ a 50€ (almuerzo excluido).
Tren Oslo-Bergen
Ya que hemos hablado de paisajes nevados, ha llegado el momento de volar a Noruega para dar una oportunidad a la línea Oslo-Bergen. Inaugurada en 1909, hoy acompaña a intrépidos viajeros a bordo de vagones completamente renovados que pasan por lagos, ríos, cascadas y, obviamente, fiordos. Podréis hacer este viaje por etapas, bajando en cada parada para explorar las bellezas del lugar. Pero también tendréis la opción de disfrutar completamente del paisaje de su ruta de 493 km que conecta Oslo y Bergen.
Sinceramente, os recomendamos elegir algunas paradas intermedias y disfrutar de las bellezas local. ¿Queréis algún ejemplo? Bajando en Gol, que está más o menos a mitad de camino, podréis tomar un autobús hasta Hemsedal. Aquí está la opción de esquiar en invierno o hacer excursiones a pie en verano.
Otra parada muy popular es Finse, el punto más alto alcanzado por este tren. Este minúsculo pueblo de montaña se encuentra a 1.237 metros sobre el nivel del mar y sólo es accesible por este medio de transporte. Desde allí parte el Rallarvegen, una de las rutas ciclistas más panorámicas de toda Noruega. Si, en cambio, son los fiordos lo que os interesa, debéis bajar en Myrdal, estación de intercambio con el ferrocarril de Flåm (Flåmsbana) que, a su vez, os llevará a visitar algunos de los fiordos más famosos del país, como el Aurlandsfjord.
En resumen, ¡hay muchísimas opciones! Esta fórmula de viaje es perfecta también para aquellos que buscan vacaciones más sostenibles: los viajes sobre rieles impactan menos en comparación con los viajes en coche. Pensadlo y no os arrepentiréis.
Rocky Mountaineer
Cuando se habla de naturaleza y vistas tenemos que mencionar a Canadá. ¿Sabéis que podéis visitar este maravilloso país viajando en tren? Subid a bordo del Rocky Mountaineer que, con sus muchos itinerarios, puede llevaros a diferentes zonas de Canadá y Estados Unidos. Es un tren de lujo que ha ganado tres veces el premio World’s Leading Luxury Train Award.
Con ventanas de altura completa apreciaréis el paisaje canadiense en cuatro diferentes recorridos: de Vancouver a Banff, de Vancouver a Jasper (disponible en dos versiones con paradas intermedias) y de Moab a Denver (EE. UU.). En cuanto al período en el que viajar, recomendamos el otoño: ¿tenéis idea de lo que puede ser el follaje en Canadá?
West Highland Line
Volvamos por un momento a Europa para descubrir las maravillosas Highlands occidentales de Escocia: la West Highland Line es considerada una de las líneas ferroviarias más bellas del mundo porque atraviesa algunos de los paisajes más mágicos de Escocia.
Los itinerarios son tres y todos parten de Glasgow para llegar a Oban, a Fort William o a Mallaig, el destino más lejano de todos. Claro, el tren no es el medio más rápido para atravesar zona, pero es precisamente en la lentitud donde reside el secreto de la belleza: tendréis la posibilidad de admirar escenarios realmente increíbles fuera de la ventana.
Y si nada os impide deteneros a mitad de camino, haced una parada de unos días para visitar los alrededores. Añadimos, además, que los fans de Harry Potter encontrarán aquí su paraíso: el Jacobite (que conecta Fort William con la ya mencionada Mallaig) es conocido también como Hogwarts Express, porque es el histórico tren de vapor que aparece en la saga del popular mago. ¿Estáis listos para buscar las ubicaciones más famosas?
Rovos Rail
¿África en tren? ¡Venga! Entre los viajes en tren, este es uno de los más espectaculares. Rovos Rail es una ruta ferroviaria de lujo que os llevará a descubrir cascadas, desiertos, sabanas y paisajes inmaculados. Los trenes de Rovos tienen capacidad para un máximo de 72 pasajeros en vagones que evocan el estilo victoriano. A bordo hay de todo: el vagón panorámico para las vistas, el lounge donde tomar una copa y, obviamente, el vagón restaurante, donde disfrutar de deliciosos platillos.
En cuanto a los itinerarios previstos, hay muchos: está el clásico Pretoria-Ciudad del Cabo, perfecto para visitar Sudáfrica. Pero también hay rutas más largas, ideales si queréis atravesar varios países. ¿Queréis algún ejemplo? Está la que va de Pretoria a Namibia, para apuntarse a un emocionante safari. O el Africa Coast to Coast, que va de Dar Es Salaam a Lobito, en un recorrido de este a oeste. En cuanto a los costes, preparaos para desembolsar varios miles de euros: no es ciertamente un viaje económico, pero si tenéis ahorros, considerad hacer esta maravillosa experiencia.
The Ghan
¿Os imagináis a Australia en esta guía? Seguramente no, pero sabed que es una posibilidad que podéis considerar para vivir una experiencia diferente a la habitual.
The Ghan atraviesa Australia de sur a norte, partiendo de Adelaida y llegando a Darwin o Alice Springs (y viceversa), haciendo algunas paradas en el camino. Los paquetes a la venta son variados: podréis pasar a bordo del Ghan de una a tres noches, atravesando una increíble variedad de territorios.
Atravesaréis el outback australiano disfrutando de maravillosos atardeceres desde ventanas súper panorámicas, para luego pasar la noche viajando en una cómoda cabina. Podréis bajar en Marla y observar la belleza del amanecer en el corazón del outback. Luego llega el turno de Alice Springs, para luego volver a viajar durante las horas nocturnas, recorrerriendo el desierto que os llevará directamente a Darwin.
La Trochita
Concluimos esta guía sobre los viajes en tren más bellos del mundo volando a América Latina para presentaros La Trochita, conocida también como Viejo Expreso Patagónico. Conecta las provincias de Río Negro y Chubut (Patagonia argentina) recorriendo 402 km entre Esquel e Ingeniero Jacobacci. Es una de las líneas ferroviarias más meridionales del mundo (aún en funcionamiento) y atraviesa paisajes que serían imposible ver si no fuera desde la ventana de dicho tren.
La línea está en funcionamiento desde hace 70 años, pero solo en las últimas décadas se ha convertido en un medio de transporte turístico: de hecho, nació para conectar regiones que en ese entonces estaban completamente aisladas del resto del país. Hoy es un monumento nacional, además de un tren de postal. Los interiores son los originales, así que no esperéis el máximo de comodidad: los vagones son de madera y muy austeros, y dentro de cada vagón hay una estufa de hierro que los viajeros pueden alimentar para calentar el ambiente.
El viaje es lento porque la velocidad máxima alcanzada por el tren es de 60 km/h. Pero hay un aspecto positivo: tendréis todo el tiempo para observar y grabar en la memoria lo que veáis fuera de la ventana. Último consejo no solicitado: si os gustan los libros de viaje, antes de partir dadle una oportunidad a “The Old Patagonian Express” de Paul Theroux, gracias al cual esta línea ferroviaria se hizo famosa. En resumen, si hacéis un viaje a la Patagonia, la opción de subiros a bordo de este dinosaurio a vapor es una opción para considerar.
El Chepe Express
El Chepe Express es una joya del turismo ferroviario en México, ofreciendo un viaje único a través de la impresionante Barranca del Cobre. Este tren de lujo conecta Los Mochis en Sinaloa con Creel en Chihuahua, recorriendo aproximadamente 350 kilómetros a lo largo de paisajes montañosos espectaculares.
A lo largo del recorrido, podréis disfrutar de vistas impresionantes de cañones, ríos y montañas. El tren pasa por lugares icónicos como Divisadero, donde se puede acceder a actividades de aventura en el Parque Barrancas del Cobre, incluyendo tirolesas y senderismo. Además, las paradas en pueblos mágicos como El Fuerte y la oportunidad de explorar la cultura local añaden un valor significativo al viaje.
Quién ha viajado en el Chepe Express destaca la belleza de los vagones y la calidad del servicio y de las comidas. Un aspecto a mejorar parece ser la puntualidad del tren, así que tenedlo en cuenta si váis a hacer este viaje.
Viaja en tren con WeRoad
¿La idea de hacer un viaje en tren os está tentando desde que comenzasteis a leer esta guía? Por suerte está WeRoad, que es capaz de cumplir todos vuestros deseos. Echad un vistazo al viaje Norte de Europa en tren para descubrir el itinerario sobre rieles que podréis disfrutar próximamente. ¡Preparaos para sacar muchas fotos!